Algo inesperado surge de pronto y las cosas cambian. Nacemos,nos desarrollamos y de pronto somos mayores, por lo menos físicamente, ¡nos enamoramos! o creeemos hacerlo y sobre todas las cosas confiamos en esa persona.........la sociedad, nos ha hecho creer que ésa persona cuidará de nosotras, que sera un aliado, un amigo, alguien a quien confiarle ¡nuestra vida misma!... pero de verdad... ¿eso ocurre?
¿  Es la vida color de rosa, como en los cuentos de adas,
que de niñas nos leía nuestro papi, o el que pregonan por todos los medios de información ?
      Nos han enseñado solo una parte de la realidad y es por eso, nadie o muy pocos se atreven ha enseñarte la otra cara de la situación, a defender tus derechos, a saber defender tu integridad física, moral, que son realmente lo que debe importar siempre, a cada momento, en cada instante. De pronto sentimientos cargados de ira, de culpabilidad son solo los que te invaden y no sabes como reaccionar, te avergüenza, te da miedo, tan siquiera de que alguien sospeche o se llegue a enterar a ciencia cierta de lo que te ocurre y ¿que haces? ........callas...guardas silencio... primero a las palabras hirientes, a las actitudes ofensivas, al abandono, piensas que es una mala racha, que es por sus problemas laborales, ¡buscas una y mil excusas!.....  ¡pronto volvera a ser el mismo hombre! ¡cariñoso, amable y atento!.